Estas emisoras replican que efectivamente existen un buen número de emisoras que emiten ilegalmente, pero que hay muchas otras que lo hacen porque no se ha convocado el concurso administrativo correspondiente o simplemente porque la mayoría de las licencias oficiales han sido otorgadas a empresas cercanas a las autoridades.
Efectivamente en el medio de este problema se encuentran las autonomías y los municipios, que son los que históricamente han entregado las licencias. Las emisoras piratas se quejan de que llevan años esperando una licencia, pero sin embargo, durante todo ese tiempo han pagado sus impuestos y las cotizaciones de sus empleados.
Esta situación de alegalidad permita que radios que en teoría están fuera de la ley, estén constituidas formalmente como empresas, tengan una sede e incluso muchas tenga publicidad de administraciones locales. Quizás este sea uno de los motivos por los cuales no se cierran estas radios, a pesar de que la Ley FM de 2005 exigía explícitamente su cierre.
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FUENTE: PR NOTICIAS
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